Entre el Fin y el Origen de la Tierra

Por: Marisol Roldán

“Para evitar este dramático futuro son necesarias mejores regulaciones e inspecciones de datos y experimentos sensibles. Necesitamos mantener la pista de quienes tienen un conocimiento potencialmente letal. Y debemos realizar más esfuerzos para reducir la cantidad de gente que se siente excluida o motivada de otra manera a causar daño", según afirmó el astrónomo inglés Sir Martín John Rees, profesor de la Royal Society Research de la Universidad de Cambridge. Unas palabras de Rees que intentaban hacer ver recientemente que la posibilidad de un fin trágico, más o menos cercano, de la Tierra a aumentado un 30% en las últimas décadas.
En su último libro, Nuestra Hora Final, el astrónomo insta a concienciarnos un poco más sobre esa posibilidad e incluso en su obra se aventura a teorizar sobre diferentes formas del fin del mundo. Un trabajo que no pretende ser apocalíptico y si preventivo. Para Rees “incluso una sola persona podría causar un desastre” y para ello, en el acto de presentación de su estudio, hacía una reflexión sobre los atentados del 11 de Septiembre en Estados Unidos y la posibilidad de la guerra bacteriológica personificada en las controvertidas cepas de ántrax. Otras posibles causas de la extinción del planeta Tierra, según Rees podrían ser un artificial Bing Bang causado por los propios científicos humanos o la erupción de alguno de los grandes volcanes de nuestro mundo que produjese una especie de película de humo en la atmósfera que no permitiera el paso de la luz de nuestro astro rey, causando la muerte de toda vida.“Por primera vez la naturaleza humana en sí misma no está preparada. Los medicamentos biotecnológicos y la ingeniería genética están otorgando poderes a los individuos más que nunca antes en la historia", añadió el científico británico. He incluso el astrónomo se atreve a dar una fecha, el 2020, como posibilidad de que cualquier “bioerror” o ataque biológico pudiera causar que pereciesen gran parte de la humanidad.
Cuando se profetiza científicamente el apocalipsis también hay expertos que intentan conocer algo más del orbe terrestre y su origen. Entre ellos encontramos a Stein B. Jacobson, profesor de geoquímica de la Universidad de Harvard, el cual expone en un completo análisis publicado en la revista especializada Science donde aboga porque “la Tierra se transformó en un enorme cuerpo planetario mucho antes de lo que se creía previamente, unos 10 millones de años antes del nacimiento del sol. Análisis anteriores de la corteza de la Tierra han concluido que el planeta se formó unos 50 millones de años después que el Sol”. Jacobson va más allá y dice que tras revisar una gran cantidad de datos y gracias a nuevas informaciones y medidas tras el estudio de algunos tipos de meteoritos esta teoría podría concretarse aún más, ya que para él nuestro planeta habría alcanzado un 64% de su actual medida tan sólo 10 millones de años después de la aparición del Sol en el Universo.